La puerta secreta al Parque natural de Bertiz
Esta sencilla entrada de hierro oxidado , nos separaba en mundos tan distanciados.
Yo con mis humildes ropas limpias provenía de un hogar de miradas y silencios donde las palabras no tenían mucho que decir y mucho menos, enseñar.Las miradas eran nuestro lenguaje para hacer, dejar de hacer o callar.
El futuro señor de Bertiz con sus elegantes ropas sucias provenía de un hogar de escuchas y risas donde las palabras divertían mucho y más aun ,.enseñaban El brillo de los ojos eran su lenguaje para disfrutar de la comida , la conversación y el conocimiento.
Abrir esa puerta y entrar lentamente me acercaba a un mundo de flores en las cortinas , lamparan tan brillantes como las estrellas y comidas dispuestas en platos como mosaicos .
Creo que era mi ingenuidad , mi fascinación y mi inocencia ,lo que le atrajo a mi .
Cada tarde me acompañaba a la salida de su mundo ,me veía cruzar la puerta y me espiaba hasta que dejaba de verme ,en el puente de Reparacea.
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