Pelotas de piel, manos de pelota

Hay sonidos que se graban en los recuerdos:

– El hacha cortando el aire y golpeando la madera.

– Las pisadas sobre hojas secas en el parque de Intzacardi en esos días otoñales.

– El ir y venir de las olas en la orilla del mar.

– El golpe seco de la pelota vasca en el frontón de cualquier pueblo de estos valles tranquilos…

– Aitona: ¿ cuándo me enseñaras como se hace una pelota ?…jugaré con mis amigos y botará hasta el número 5

Las manos fuertes, de mucho trabajar, del aitona toman la pelota de goma , 24 gramos, que una vez terminada entregará a su nieto.

Poco a poco y después de colocar la capa de látex, los dedos dejan  resbalar un hilo de lana virgen que ira vistiendo la pelota .Los dedos se deslizan despacio , enseñándole al hilo el camino a recorrer .Las miradas  se encuentran en silencio, enseñándole al joven el camino a recorrer.

Una vez la pelota se viste se lana , se recubre de hilo de algodón ,siguiendo el mismo proceso :pasos delicados que darán carácter a la pelota.” La de mi nieto no pesara mucho ,esta aprendiendo… le pone ganas y entusiasmo”.Cavilaba el Aitona.

La piel de oveja cortada en forma de ocho y humedecida para que no se rompa, cuando la aguja  clave su punta afilada . Dos Ochos  de piel cortados idénticos , entrelazados y cosidos con decisión y conocimiento .”Nosotros también formamos dos ochos entrelazados cuando se sienta en mis rodillas para que le cuente historias de juventud y se acurruca en mis brazos “– Piensa el Aitona.

Unas chinchetas le ayudan a la mano-sastre  en su tarea de coser.

Una vez terminado el cosido y se dejará la pelota al aire libre. La pelota terminada pesa alrededor de 95 gr de paciencia-sabiduria.

– Eh! Antes de jugar debes botar la bola 1500 veces…

– ¿Tantas?

– Todo largo camino se recorre pasito a pasito… Empieza a botar y cuando acabes ,conocerás tanto a tu bola que jugará siendo parte de ti… “Como tú lo eres de mí- pensó el aitona”.